Y menos con la que está cayendo.
Julio es muy mal mes para tomar decisiones. Sólo se le acerca diciembre, que también es pésimo.
¿La razón?, llevas 11 meses con mucho trabajo, "recalentándote la cabeza", con ansiedad por tomarte vacaciones... y eso nos hace irracionales. No tengo estadísticas, pero sí un feeling: en julio es cuando más gente piensa en cambiar de trabajo.
Además se une que suele ser mes (por cumplimiento de semestre) de evaluaciones en las compañías. Por naturaleza nunca estamos contento con lo que nos dicen.
Si añadimos que con la mala situación económica, las perspectivas profesionales no son las mejores (es probable que a alguien que conozcas le hayan echado de su empresa, que otros cuantos lleven un tiempo sin encontrar trabajo, que tu subida de sueldo del año que viene peligre, así como tu ascenso...), el peligro de tomar malas decisiones aumenta mucho.
Date una tregua, respira hondo y no te precipites.
¡¡Pasa unas buenas vacaciones!!
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