jueves, 16 de julio de 2009

Tener un bebé "bueno" es "cansado"

No se cómo será tener un bebé que duerme mal, come de forma dificultosa, tiene cólicos, etc... pero seguro que es agotador.

Lo que sí se es que si es bueno (Martina es un cielo) es muy cansado, aunque nunca una tarea tan agotadora la realizas con tanto entusiamo. Siempre he dicho que me encanta sentirme cansado, ahora me gusta mucho más.

El problema es el "envalentonamiento", es decir, "como Martina se porta muy bien, ¡¡vamos a movernos!!". Y no te das cuenta que en cada movimiento arrastras una losa de "cachiperris" y "cuidados varios" de la que no eres consciente. Estoy como un niño que descubre algo nuevo cada rato y me he dado cuenta de... ¡¡qué feliz es la insconsciencia!!, acabo reventado, sí, pero feliz.

Nos apetece ir a la piscina... ¡pues adelante!, que Martina ni se va a inmutar. Dicho eso y tras el consiguiente brinco del sillón, empieza el rosario de "temas a tener en cuenta" y para cuando llegas a la piscina Martina está feliz, sí, pero sus padres ya llegan exhaustos. Luego viene la vuelta, que es tan cansada como la ida, pero un poco más, porque llueve sobre mojado.

Lo apasionante de esto es la pueril y primeriza "inconsciencia" (relativa) que nos invade. Siendo así, puede más la ilusión que el enfoque práctico, pero... ¿qué más da eso?. No estaré tan cansado si tengo fuerzas hasta para contarlo...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esos pequeños y lindos sacrificios de hoy. . ., que vendran luego otros, y . . . otros. Son lo que hacen tomar cariño a los pequeños y cuando van siendo personas mayores, sentirnos orgullosos de ellos, aunque ellos no lo noten, pero ser padres a vecer requiere hacer cierto teatro pensando que es el bien de ellos, colega, vas por un camino muy bonito.

Hasta otra y por cierto a Raquel, tambien hago participe de lo que digo.

Avelina dijo...

Alex y Raquel, os felicito por ese bellezón de niña que teneis.

Y qué buena que es, hemos tenido la oportunidad de pasar un día con ella y no lloró en ningún momento, ni una sola lagrimita, solo comía y dormía.

QUE LINDA!