jueves, 16 de octubre de 2008

La publicidad se asusta y se ajusta

La publicidad cuenta muchas cosas, como en si es un ejercicio creativo, a veces se anticipa y juega el papel de visionaria.

La creatividad es un concepto que llevado a la práctica deriva en innovación, es decir, si una idea creativa tiene recorrido real y es "monetizable" es una innovación.

A los publicistas le cambian constantemente las reglas de juego por ser una industria muy dinámica. Por ejemplo, ahora la publicidad en televisión anda revuelta por muchas razones, entre otras por la inminente llegada (ya lleva un tiempo entre nosotros) y socialización del DVR, vamos, un grabador como el vídeo VHS que todos hemos tenido en casa, pero que graba en digital. Como un DVD pero que no sólo reproduce, si no que también graba.

El problema es que, dada la tremenda oferta televisiva que hay y habrá, en nada podremos de forma muy fácil hacernos nuestra "carta" de TV que queremos ver cuando lleguemos a casa, independientemente de lo que "echen" en ese momento.

Es decir, si a mi me gustan las películas de Julia Roberts, programo el DVR para que identifique todas las que emitan y cuando llegue a casa las veo.

¿Qué significa eso?, que cuando haya anuncios le doy al "pasar rápido" y nos los veo. Total, nuevo reto para los publicistas de TV, ¿cómo hacen para que sus anuncios no pasen desapercibidos?. Si pasan desapercibidos bajarán sus ingresos porque los anunciantes no querrán hacer anuncios en TV, claro

Como es normal, en USA ya le llevan dando vueltas a esto un tiempo y Sprite ya ha producido anuncios especiales para DVR donde si se ven a velocidad lenta se pueden indentificar códigos ocultos para poder conseguir premios. Sony, para su marca Bravia, ha creado anuncios con distintos finales para que puedan ser votados, así "obligan/incitan" a verlos. Algo parecido ha hecho Kentuky Fried Chicken.

Ante la adversidad, creatividad e innovación, aunque imitando a algunos también podrían haber pedido que el estado les subvencionase su posible bajada de ingresos, ¡juas!

No hay comentarios: