Hoy es 15 de diciembre y tenemos la cabeza "como un balón de nivea".
Julio y diciembre son las peores fechas para tomar decisiones puesto que acumulas el cansancio de muchos meses sin descanso y es difícil mantener la cabeza fría. Y más aún en el actual entorno donde parece que los buitres sobrevuelan nuestras cabezas y las hienas babean y se frotan las manos con sonrisa nerviosa.
En una semana llega la borrachera de "buenrollismo" (perdón por mis "palabros", si por mi fuera todas las semanas agrandaríamos el diccionario con neologismos) que también es ilusoria ya que el turrón y El Corte Inglés confitarán las malas noticias.
Pero en esta navidad con minúscula toca coger aire para ver si has tomado la carrerilla necesaria para afrontar el 2009. Yo lo haré, es un ejercicio de supervivencia, sin pensar (aunque sea un cuarto de hora al año) lo que pretendes hacer y si estás en esa línea no se puede vivir como deseas, se puede aprovechar la fuerza de la marea, pero no decidir en qué puerto quieres pasar la noche.
lunes, 15 de diciembre de 2008
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